Ya entramos en
la semana en la que prácticamente nos despedimos del verano o por lo menos, sí
de las vacaciones, la mayoría. Así que empezamos la rutina del blog con un
espacio de trabajo pero qué espacio. Se trata de la floristería BLUSH FLOWERS, localizada en Nueva Zelanda. Siempre he pensado que si no fuese
arquitecta hubiera sido florista, me parece un trabajo de lo más creativo y
bonito y los resultados siempre son agradables. No conozco una flor fea, así
que por muy mal que lo haga siempre será un arreglo “bello” ;-) Es por ello que
dejando volar mi imaginación me imagino ese lugar de trabajo y sin dudarlo se
acerca mucho a éste. Tengo épocas y actualmente estoy en plena fascinación con
el dorado, el rosa empolvado siempre me acompaña y el contraste entre el blanco
y el frío suelo gris me encanta. Así que sí seguramente sería como este espacio
y con esos tremendos ventanales para ver el exterior, sí seguro que fluye
creatividad por todos los rincones. Qué te parece a ti este lugar de trabajo???
2 comentarios
Que espacio tan bonito... Me encanta imaginar espacios donde me pasaría el rato jugando con las flores y es que a veces pienso que ser florista también me gustaría mucho mucho!
Yo siempre he pensado que es una profesión bellísima :-)
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